Un espacio único para el hogar
¡Cultivar un pequeño y maravilloso jardín de microplantas en casa es más fácil de lo que piensas! Puedes crear un espacio verde único, tanto para disfrutar de tus momentos de relax como para tener tus propias microplantas frescas y listas para comer en cualquier momento.
Las plantas siempre son una buena idea
Obviamente, poder cultivar tus propias verduras ecológicas sin necesidad de un espacio externo es el principal beneficio de cultivar un jardín interior de microplantas. Pero también es un modo perfecto para disfrutar de algunos momentos de relajación y en familia rodeado de un entorno verde único. Descubre nuestros consejos para disfrutar de tus propias ensaladas saludables durante todo el año.
Todos los beneficios de las microplantas
En esencia, las microplantas son verduras de hoja jóvenes: plantas baby, algo entre un brote y las verduras baby. Su atractivo aspecto, junto con sus sabores aromáticos, son capaces de darle un toque especial a cualquier receta, especialmente a las ensaladas, los sándwiches y los wraps. Además, estas pequeñas verduras también son perfectas para una dieta saludable, ya que su concentración de nutrientes ¡es hasta 40 veces superior a la de sus versiones maduras!
Cómo cultivar un jardín de microplantas
Cultivar microplantas en casa es muy fácil, incluso si no cuentas con herramientas especiales ni tienes experiencia en jardinería: solo necesitas una bandeja, semillas de tus verduras favoritas, sustrato y... ¡mucha luz!
El primer paso es preparar las semillas: para ayudar a que germinen rápidamente, puedes dejarlas en remojo en agua tibia durante la noche.
El segundo paso es preparar el sustrato para las semillas: simplemente humedécelo, rocía agua tibia sobre el sustrato y mezcla hasta que la humedad se distribuya de manera uniforme.
El tercer paso es sembrar las semillas: espárcelas sobre toda la superficie de la mezcla y presiona (¡pero solo un poco!). A partir de este momento, deberás regar las semillas todos los días. Puedes usar un rociador para mantenerlas uniformemente húmedas y evitar que las semillas se dañen. Recuerda: las semillas nunca deben secarse, así que compruébalas todos los días y, si es necesario, cubre la bandeja con un paño húmedo.
¡Hora de cosechar! Cuando tus microplantas estén listas, córtalas delicadamente con tijeras justo por encima del sustrato y empieza a preguntarte en qué deliciosa receta puedes utilizarlas.
Agua de regado
Al igual que muchas plantas y hortalizas, las microplantas necesitan una gran cantidad de agua. El regado es una ocasión perfecta para poner en práctica una solución ecológica que evita los desperdicios: la secadora AXI de Hoover está equipada con un depósito de agua especial. Gracias a él, puedes usar el agua (después de filtrarla) en tu jardín interior de microplantas. ¿Tus plantas no necesitan agua? ¡Utiliza el agua del depósito de AXI para limpiar tu casa! Siempre hay una solución para evitar el desperdicio y actuar de forma ecológica.